Cinco kilómetros de la ciclovía que corre por las colonias Belvedere y Cultura Maya, en la zona media del Ajusco, fueron liberados del tianguis que ocupaba la vía los fines de semana.
Con esa acertada medida se devolvió a la pista su vocación de espacio dedicado al paseo peatonal y en bicicleta. El tianguis se reubicó a dos calles del sitio que ocupaba, y ya no implicará, para los paseantes, problemas de vialidad y tránsito los sábados y domingos. Así mismo vecinos de siete colonias cercanas se organizaron para limpiar y reforestar la pista, de 25 kilómetros de longitud, y el área verde que la rodea.
Las jornadas de reforestación y mantenimiento a la flora del lugar se llevan a cabo los fines de semana y han tenido una gran aceptación, sobre todo de los niños, quienes disfrutan de las actividades que organizan los voluntarios.
En una primera fase, planean recuperar los primeros tres kilómetros, aproximadamente, hasta la calle de Seyé, y a la fecha ya han plantado unos 700 árboles en 11 jornadas de recuperación, entre ellos capulines, encinos, oyameles, cedros blancos, ciruelos, truenos y rosa laurel.
La Ciclopista Rural de Tlalpan atraviesa bosques y zonas de cultivo y pastoreo de un área natural cuya relevancia ambiental destaca porque ahí se recarga el 70% de los mantos acuíferos de la Ciudad, además de que alberga 2% de la biodiversidad mundial.
Como la ciclopista sigue el curso de las viejas vías del Ferrocarril de Cuernavaca, no hay pendientes pronunciadas ni cerradas curvas, de modo que no hace falta ser profesional para disfrutar un recorrido en bicicleta. Cualquiera, con sólo quererlo, puede disfrutar ahí de un buen día, una rica tarde, mientras ejercita el cuerpo.
La Ciclopista Rural de Tlalpan, que inicia en la colonia Chichicaspa y termina en el poblado Fierro del Toro, en el estado de Morelos, cubre una distancia de 34 kilómetros.
Si deseas tips de cómo recorrerla te recomendamos visites el siguiente blog: http://www.alaingarcia.net/agcronicas/ciclopista.htm